La minería en León está herida de muerte. Administrada por los caciques locales que sólo miran para su bolsillo y cada vez más despreciada por los gobiernos de Castilla, Madrid y Bruselas, el sector del carbón leonés no da más de sí que para unos pocos años. ¿Entonces que se trata de defender con esta última protesta minera? ¿Prolongar la agonía de comarcas como Laciana o Gordón o la supervivencia en sí de estas zonas? ¿Alargar la vida de un puesto de trabajo unos pocos años más, para que algunos lleguen a poder prejubilarse o que ese puesto de trabajo perdure en el tiempo no importando en que sector se encuentre dicho puesto?
La minería leonesa lleva mucho tiempo sufriendo varapalos continuos y las protestas de los trabajadores, siempre se han centrado única y exclusivamente en defender el presente inmediato de su puesto, nunca han mirado más allá de unos pocos años. Los Fondos Miner han sido esquilmados desde Castilla con el beneplácito del estado y nadie (excepto unos pocos "locos extremistas") ha alzado ni un leve quejido. Los Fondos Miner, deberían haber supuesto la creación de un tejido empresarial suficiente, para que León no dependiera económicamente de la minería, al menos, no de la forma tan brutal como lo hace en la actualidad. Esos Fondos Miner, se han usado para complementar el dinero que deberían recibir esas comarcas en los presupuestos ordinarios, nunca han sido un añadido con el que crear un plus de riqueza. ¡Se ha llegado a dar la paradoja de invertir Fondos Miner en Valladolid!. Y respecto a esto que es el quid de la cuestión, que hubiera sido y sería la verdadera tabla de salvación de esas zonas, no se ha alzado ni se alza en la actualidad ninguna voz de protesta. Aparte de para defender el futuro inmediato del carbón, se debería protestar con igual o más energía ante el gobierno castellanopucelano y estatal, para exigir que nos devuelvan todo los miles de millones de euros que han robado al futuro de los leoneses y sin embargo, no hay ni un pequeño comentario de alguien relacionado con la minería leonesa al respecto. ¿Tan ciegos estamos, o es que vivimos tan humillados, que no somos capaces de alzar vista más allá de donde nos deje el amo? El futuro del pueblo leonés está en buena parte en manos de sus ciudadanos. ¿Seremos capaces de levantarnos y defendernos con energía, y dignidad ante los agravios e injusticias que sufrimos de manera habitual y persistente desde hace tres décadas? ¿Seremos capaces de apartar la vista del cada vez más exiguo pesebre y dar una contundente patada democrática, a tanto desvergonzado castellano o acastellanado disfrazado de intelectual protector? O despertamos ya y defendemos el ayer, hoy y mañana de nuestra Región o no tardaremos demasiado en no tener nada que defender, porque sencillamente no existiremos. ¡¡¡VIVA LEÓN!!!