Lamentable

Antonio Silván , el acastellando por excelencia, es nombrado en la localidad de Llamas de la Ribera Guirrio Honorífico 2009, y le han pedido que les ayude a conseguir la declaración de fiesta de interés “regional”, porque representa los valores culturales de la comunidad. “El risitas” por su parte ha manifestado que,«el Antruejo de Velilla refleja las raíces y las tradiciones de las gentes del Órbigo y que se caracteriza por representar la libertad y la cultura». A continuación tras la promesa del acastellanado de intentar conseguir esa declaración, los habitantes de esa localidad han vitoreado al señorito venido de Castilla, al grito de “ que bote, que bote…”.
Este Barquero, no puede menos que manifestar ante este acontecimiento tan triste y lamentable, su total repulsa y reprobación, con el deplorable comportamiento de una buena parte de sus paisanos, de esta zona tan leonesa. Por lo que se ve, la dignidad y el orgullo se está perdiendo en esta Región, mucho más rápido de lo que yo pensaba. Imponer una mención como esta, a un personaje que tantísimo daño está haciendo a nuestra economía y cultura, es de una torpeza descomunal. Entre peor nos trata el amo Pucelano, parece ser que más se humilla parte del pueblo leonés. Barbaridades como esta, dan alas a los junteros en su lucha por disolver nuestra histórica región, y hacen tambalearse a los que están tratando de oponerse a este saqueo que sufrimos desde hace al menos 25 años. Tristes y sombríos son los tiempos que le toca vivir al Reino Leonés. Mucho han de esforzarse los dignos leoneses, para vencer esta corriente de mezquindades a las que se ve sometida esta tierra, y que son infligidas en buena parte por sus propios hijos. Es cruel e injusto, pero hay que sobreponerse y redoblar esfuerzos, no queda otra.